La próstata es una glándula del aparato reproductor masculino. El cáncer próstata es la enfermedad que se produce cuando se forman células malignas en sus tejidos.
Está justo debajo de la vejiga (órgano que recibe y expulsa la orina) y delante del recto (parte inferior del intestino).
El cáncer de próstata es uno de los que no dan señales concretas y puede pasar desapercibido, sin embargo, detectarlo a tiempo ayuda a tener más posibilidades de supervivencia.
Es el tipo de cáncer más común en los hombres, se estima que uno de cada 8 serán afectados por el cáncer de próstata.
Aunque no existen señales concretas, el cáncer de próstata podría lanzar algunas advertencias al ir al baño como las siguientes:
- Flujo de orina débil o interrumpido.
- Urgencia repentina de orinar.
- Necesidad frecuente de orinar (en especial, de noche).
- Dificultad para empezar el flujo de orina.
- Dificultad para vaciar la vejiga por completo.
- Dolor o ardor al orinar.
- Sangre en la orina o el semen.
- Dolor de espalda, cadera o pelvis que no desaparece.
- Falta de aire, mucho cansancio, latidos rápidos del corazón, mareo o piel pálida a causa de anemia.
La próstata tiende a crecer con la edad y bloquea la uretra o la vejiga. Esto puede producir problemas al orinar o problemas sexuales. Esta afección se llama hiperplasia prostática benigna (HPB) y, aunque no es cancerosa, a veces se necesita cirugía para tratarla. Los síntomas de la hiperplasia prostática benigna u otros problemas de la próstata se parecen a los síntomas del cáncer de próstata.
Puedes reducir el riesgo de padecer cáncer de próstata de la siguiente manera:
Sigue una dieta saludable con muchas frutas y verduras. Come una variedad de frutas, verduras, y cereales integrales. Las frutas y los vegetales contienen muchas vitaminas y nutrientes que pueden contribuir a mejorar tu salud.
Elige alimentos saludables en lugar de tomar suplementos. No existen estudios que hayan demostrado que los suplementos desempeñen una función en la reducción del riesgo de cáncer de próstata.
Haz ejercicio la mayoría de los días de la semana. El ejercicio mejora el estado de salud en general, te ayuda a mantener el peso y mejora tu estado de ánimo. Trata de hacer ejercicio la mayoría de los días de la semana.
Mantén un peso saludable. Si tu peso actual es saludable, mantenlo eligiendo una dieta saludable con una variedad de frutas y verduras y haciendo ejercicio la mayoría de los días de la semana.