Aunque la infección de vías urinarias es un padecimiento relacionado con la población adulta, los niños también son un sector vulnerable ante este trastorno inflamatorio que resulta frecuente en la edad pediátricaClaudia Pérez Corral, subjefa médica de la Jurisdicción de Servicios de Salud en Ensenada, explicó que, a diferencia de la población adulta, la infección en menores de dos años tiene mayor dificultad para el diagnóstico.Lo anterior, dijo, pues es confundida con infecciones respiratorias virales, lo que implica el riesgo de complicaciones y secuelas.En ese sentido, detalló que entre los signos de alerta en recién nacidos y lactantes destacan la fiebre sin causa evidente, falta de apetito y anorexia; además de expulsión involuntaria de orina por la noche, palidez, irritabilidad, náuseas y vómito ocasional.
En los infantesMientras que en niños de edad preescolar, escolar y adolescentes, las manifestaciones clínicas se localizan en el aparato urinario, por lo que se presentan dolor o dificultad al orinar, necesidad de hacerlo varias veces, orina fétida y con sangre e inflamación inespecífica.Pérez Corral exhortó a los padres de familia que, ante cualquier sospecha de infección de vías urinarias, llevar a sus hijos a valoración con el médico general para descartar cualquier anomalía.
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